Qué es Baby blues y cómo se diferencia de la depresión postparto
Fecha de publicación: 22-11-2022
Actualizado en: 28-04-2023
Asunto: Salud mental
Tiempo estimado de lectura: 1 min
Autor del Artículo
Clelia AndolinaEditor médico
Cristina Anna ColomboEditor y Traductor
Viktoryia LuhakovaEl nacimiento de un hijo es un acontecimiento típicamente asociado a un ideal de felicidad, satisfacción y alegría para los padres, hasta el punto de que a muchos les parece imposible que una nueva madre no se sienta plenamente feliz.
En realidad, poco después del parto, la mujer se enfrenta a un cambio radical en su vida, acompañado de un gran estrés físico y psicológico que puede provocar inestabilidad, tristeza y una sensación de inadecuación que puede impedirle tener una conexión emocional inmediata con su hijo.
Sin embargo, ¿cómo podemos reconocer la "melancolía" fisiológica postnatal, la llamada "baby blues", como una forma verdadera de propia depresión, la depresión postparto? Hablamos de ello con la profesora Cristina Colombo, jefa de la Unidad de Trastornos del Estado de Ánimo del Hospital IRCCS San Raffaele Turro.
Baby blues (Tristeza postparto): ¿qué es?
El baby blues o maternity blues (donde "blues" significa melancolía) es una condición parafisiológica transitoria y reversible que las mujeres experimentan en la semana siguiente al parto en alrededor del 70 al 80% de los casos, causada principalmente por los cambios hormonales típicos del periodo posparto.
Síntomas del baby blues
Los síntomas del baby blues incluyen reacciones emocionales muy llamativas por parte de la madre, como:
- llanto repentino e inmotivado;
- estado de ánimo inestable;
- sentimientos de inadecuación;
- una tristeza injustificada;
- irritabilidad.
¿Cuánto tiempo dura?
Es importante destacar que estas molestias tienen dos características muy precisas: comienzan poco después del parto (suelen producirse en un plazo de tres a cuatro días) y son transitorias, es decir, duran desde unos días hasta un máximo de una o dos semanas.
De hecho, la melancolía es absolutamente reversible y desaparece una vez estabilizado el equilibrio hormonal de la mujer.
No se preocupe, ¡se va! ¿Cómo?
Los síntomas del "baby blues" suelen tener una evolución natural positiva, mejorando gradualmente hasta desaparecer.
Al no tratarse de una enfermedad, no es necesario recurrir a terapias específicas, pero puede ser útil dejarse "mimar" por las personas cercanas, para sentirse apoyado en este momento tan delicado. La pareja y los afectos de la nueva madre pueden, en este sentido, echarle una mano, tranquilizándola, escuchándola y apoyándola y, por qué no, ayudándola en la gestión diaria del bebé y del hogar.
Aunque el pequeño acapare toda la atención, cuidarse a uno mismo procurando momentos de tranquilidad y descanso puede ayudar a aliviar la melancolía y aligerar el peso de las dificultades iniciales.
Baby blues y la depresión posparto: diferencias y cuándo buscar ayuda
La nueva madre angustiada no siempre pide ayuda: a veces le da vergüenza hablar de su estado de ánimo, sintiéndose "culpable" de su estado.
Por ello, es fundamental prestar atención a todos los signos de malestar que se perciben en la mujer, para distinguir la melancolía fisiológica de la depresión postparto.
Contacte con su médico o busque ayuda cuando se sienta mal:
- surge aproximadamente un mes después del parto, a veces coincidiendo con el retorno del ciclo menstrual;
- interfiere con las actividades diarias, incluyendo el autocuidado y el cuidado del bebé;
- es persistente y dura más de 2 semanas;
- no parece mejorar y, de hecho, empeora.
La depresión postparto, de hecho, es una forma real de depresión que debe ser llevada a la atención de un especialista en una etapa temprana. Si se detecta, puede tratarse y curarse, pero si se descuida, puede dar lugar a pensamientos o comportamientos que pongan la vida en peligro.