GAMMAGRAFÍA ÓSEA

Se utiliza para estudiar el sistema esquelético en diversas patologías. En el campo de la oncología, se utiliza para la evaluación de las metástasis, en las neoplasias óseas primarias y en la respuesta al tratamiento. Otros campos de aplicación son la evaluación de la amiloidosis cardíaca y en cuestiones ortopédicas y reumatológicas.

• oncológicos (metástasis, neoplasias óseas primarias, respuesta al tratamiento del cáncer)
• ortopédico/reumatológico (osteomielitis, prótesis articulares/dispositivos sintéticos)
• amiloidosis cardíaca

No se requiere ninguna preparación farmacológica o dietética para realizar la investigación, pero es importante informar al médico nuclear de cualquier terapia actual o previa (quimioterapia, terapia con cortisona, radioterapia), así como de traumas o fracturas anteriores. El radiofármaco, inyectado en una vena del brazo, se distribuye a través del sistema vascular hasta el esqueleto en 2 o 3 horas.  Se aconseja beber 3 ó 4 vasos de agua durante las horas de espera para optimizar la calidad de las imágenes óseas y orinar con frecuencia ya que el radiofármaco que no se fija en los huesos se elimina con la orina. La duración del examen es de unos 20 minutos durante los cuales el paciente debe permanecer inmóvil en una camilla, mientras la gammacámara recorre lentamente el cuerpo de la cabeza a los pies para obtener imágenes de todo el cuerpo. La estancia en la sala dura unas 3 horas.

Es necesario documentar la historia clínica y los exámenes previos (gammagrafía ósea, tomografía computarizada, resonancia magnética, radiografía, etc.). Se recomienda pasar un periodo de tiempo alejado de las mujeres embarazadas y los niños pequeños después del día de examen.