La toxina botulínica en la medicina estética: todo lo que hay que saber
Fecha de publicación: 18-08-2022
Actualizado en: 28-04-2023
Asunto: Dermatología
Tiempo estimado de lectura: 1 min
¿Qué es la toxina botulínica y cómo funciona? ¿Cómo se utiliza en medicina estética? ¿Es cierto que no se puede utilizar en determinados periodos del año? Hablamos con el Dr. Dino Zilio, Jefe del Departamento de Cirugía Plástica y del Centro de Medicina y Cirugía Estética del Policlínico San Donato.
¿Qué es la toxina botulínica y cómo funciona?
La toxina botulínica es una neurotoxina que actúa sobre las terminaciones nerviosas que inervan los músculos. Es conocida principalmente por su uso en el campo de la medicina estética (como el botox), pero puede utilizarse en diferentes campos en función de sus diversos tipos.
Administrada por inyección, crea una inmovilización parcial momentánea. La toxina botulínica bloquea los músculos sólo en el lugar de la inoculación, mientras que en el lugar no inoculado se produce la compensación contráctil de los músculos.
Toxina botulínica en medicina estética: uso
La toxina de tipo A se utiliza en los tratamientos de medicina estética. Se aplica en el centro de las cejas, en zonas de la frente y en el entorno de los ojos para suavizar:
- aspereza de la expresión;
- pliegues leoninos del entrecejo;
- rugosidad frontal subtalar;
- patas de gallo.
La toxina botulínica también permite obtener un efecto lifting de la cola de la ceja: es posible elevar la cola de la ceja y así ampliar la mirada, sin recurrir a la cirugía, como la blefaroplastia, aunque no sustituirla.
La idea principal del uso de la toxina botulínica es realizar un tratamiento capaz de mantener y salvaguardar la belleza natural de la persona.
El médico no debe crear miradas demasiado acentuadas, ni provocar inmovilizaciones importantes, que inevitablemente impedirían al paciente tener una mímesis natural y espontánea durante la socialización. Un buen especialista es capaz de mantener el dinamismo de las expresiones del tercio superior de la cara, por lo tanto los ojos y la frente.
Tratamiento y su duración
El tratamiento se realiza de forma rápida, en sólo 5 minutos: tras diluir el producto con solución fisiológica y desinfectar la zona de la cara que se va a tratar, el especialista realiza pequeñas rondas con una aguja muy fina. Algunos pacientes pueden sentir un leve ardor, mientras que los hematomas y moretones son poco frecuentes.
¿Con qué rapidez empieza a actuar la toxina botulínica?
Su eficacia no es inmediata. Por término medio, los primeros efectos pueden observarse al cabo de aproximadamente una semana. A la fase activa le sigue una meseta que dura unos 3-4 meses, después de la cual la eficacia de la toxina comienza a agotarse.
Hacia el 4º-5º mes el paciente comienza a ver la recuperación de la motilidad en la zona tratada. Alrededor del 6º mes se vuelve a la condición anterior al tratamiento.
Contraindicaciones
Existe una contraindicación absoluta para el uso de la toxina botulínica en pacientes con:
- neuropatías;
- distrofias musculares.
Efectos indeseables: cómo evitar las migraciones y resolver las asimetrías
Durante el procedimiento, el médico debe informar al paciente sobre las precauciones para garantizar que la toxina inyectada actúe sin causar efectos no deseados, incluyendo la migración o la creación de asimetrías.
En los primeros días después del tratamiento, para evitar una migración de la toxina o su desplazamiento desde el lugar de la inyección a otras partes de la cara, es necesario realizar movimientos desde el ojo hacia el exterior de la cara cuando se aplica el maquillaje o las cremas.
La toxina botulínica migrada podría, de hecho, causar ptosis del párpado, es decir, el descenso del párpado. Esta última se resuelve espontáneamente, pero no es agradable.
Un segundo tipo de migración que hay que evitar es la de posición, por lo que se pide al paciente que no baje la cabeza y, en general, que evite la actividad física en los dos primeros días después del tratamiento.
Las asimetrías son raras, si se producen, por ejemplo, en la zona de las cejas, pueden arreglarse en 7-10 días con un único inóculo cuando sea necesario, para reequilibrar los 2 hemisomas.
Mito: toxina botulínica en verano
"Habiendo respetado todas las precauciones inmediatamente después de la administración del fármaco, el paciente no incurre en ninguna contraindicación. Este tratamiento puede realizarse en cualquier época del año y, desde luego, no es peligroso si se realiza en verano. Las solicitudes de los pacientes no disminuyen con la llegada de la estación cálida y, en cualquier caso, siempre es una buena práctica defenderse con una excelente protección solar. La prohibición absoluta de exponerse al sol es, en realidad, un mito", concluye el Dr. Zilio.