Rayos X

¿Qué es?

Los rayos X convencionales utilizan radiaciones ionizantes para crear imágenes de las diferentes zonas del cuerpo. Es una modalidad no invasiva que se utiliza para el diagnóstico de lesiones, especialmente del tejido óseo, o de enfermedades.

¿Cuándo está indicado este examen?

Este examen se utiliza especialmente para investigar los huesos, los dientes, el tórax y el adbomen. La técnica puede utilizarse con o sin medio de contraste. Puede identificar y ayudar en la descripción de fracturas, malignidades óseas de osteoporosis, así como enfermedades pulmonares y oclusiones abdominales.

¿Cómo se realiza?

Este examen lo realiza un técnico supervisado por un médico. Dependiendo de la zona investigada, se le pedirá que se acueste o se ponga de pie. Es posible que tenga que contener la respiración y tendrá que permanecer quieto durante el examen. Por lo general, los exámenes sólo duran un par de minutos. Si se utiliza un medio de contraste, el examen durará más tiempo. Los distintos exámenes requieren diferentes preparaciones: en el caso de unos exámenes programados tendrá que obtener más detalles.

Contraindicaciones

La radiografía convencional utiliza rayos X que producen una radiación llamada "ionizante", que puede inducir daños en los tejidos biológicos. Los rayos X utilizan una pequeña cantidad de radiación para obtener imágenes de diagnóstico. En algunos casos, la cantidad es incluso inferior a la cantidad de radiación que se recibe normalmente de la luz solar. Por lo tanto, el riesgo de que se produzcan daños en los tejidos como consecuencia de esta exposición es también extremadamente bajo y el riesgo asociado a la no realización del examen suele ser mayor que el riesgo de la radiación ionizante de las imágenes. Para minimizar al máximo este riesgo, para cada examen con radiación comprobamos si es realmente necesario (principio de justificación) y, en caso afirmativo, utilizamos la menor dosis de radiación posible que nos permita obtener el mejor resultado (principio de optimización). La máxima optimización de nuestros equipos está asegurada por el control constante de un Especialista en Física Médica que garantiza el mantenimiento de la máxima eficacia. Las mujeres en edad fértil deben excluir los embarazos en curso. En caso de embarazo, aunque sólo se sospeche, es imprescindible notificarlo al médico, que valorará la conveniencia del examen y, si la valoración de la relación riesgo-beneficio propone su realización, deberá requerir un consentimiento adicional adecuado y avisar al personal para que tome unas precauciones necesarias.

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