Trastornos mentales y mortalidad por covid-19
Fecha de publicación: 27-08-2021
Actualizado en: 14-02-2023
Asunto: Covid-19
Tiempo estimado de lectura: 1 min
Autor del Artículo
Nicola QuadriEditor médico
Benedetta VaiEditor médico
Francesco BenedettiEditor y Traductor
Viktoryia LuhakovaUn metaanálisis realizado por investigadores de San Raffaele acentúa la mayor mortalidad por COVID-19 en pacientes con trastornos mentales.
Los trastornos mentales preexistentes, como trastornos psicóticos y del estado de ánimo, abuso de sustancias, discapacidades intelectuales y trastornos del desarrollo, pueden ser un factor de riesgo para una evolución más grave de la COVID-19.
Esta asociación ha sido confirmada por un equipo internacional coordinado por la Dra. Benedetta Vai y el Dr. Mario Gennaro Mazza, investigadores de la Unidad de Psiquiatría y Psicobiología Clínica dirigida por Francesco Benedetti, profesor asociado de la Universidad Vita-Salute San Raffaele. La investigación se realizó con la colaboración de Livia J. De Picker, psiquiatra del Hospital Psiquiátrico Universitario Campus Duffel de Bélgica.
En un metaanálisis publicado en The Lancet Psychiatry, los investigadores estudiaron el riesgo de mortalidad por COVID-19, las tasas de hospitalización y el ingreso en la UCI en pacientes con trastornos mentales. Los resultados pusieron de manifiesto el mayor riesgo de acontecimientos graves asociados a la COVID-19 y, por tanto, la necesidad de adoptar enfoques preventivos dirigidos a estas personas.
Investigación en San Raffaele
En el metaanálisis se incluyeron 23 estudios realizados entre enero de 2020 y marzo de 2021 con una población total de 1.469.731 pacientes de COVID-19 de 22 países. 43.938 pacientes tenían trastornos mentales como psicóticos, trastornos del estado de ánimo y de ansiedad, abuso de sustancias, discapacidades intelectuales y trastornos del desarrollo.
"Nuestro objetivo principal era analizar los datos para determinar el riesgo de mortalidad relacionado con COVID-19 en pacientes psiquiátricos. Posteriormente, también evaluamos los riesgos de hospitalización e ingreso de estos pacientes en cuidados intensivos", explica el Dr. Vai.
Los resultados entre las personas con trastornos de ansiedad confirmaron plenamente que los pacientes con trastornos mentales (en particular, con trastornos psicóticos y del estado de ánimo) tienen un mayor riesgo de mortalidad, pero no de ingreso en unidades de cuidados intensivos.
Causas posibles
Los investigadores habían planteado varias hipótesis subyacentes a la asociación entre los trastornos mentales y el mayor riesgo de mortalidad por COVID-19. Por un lado, las alteraciones inmunológico-inflamatorias vinculadas a las bases fisiopatológicas de las enfermedades psiquiátricas, por otro una mayor prevalencia de comorbilidades (obesidad, diabetes, síndrome metabólico y enfermedades cardiovasculares) y estilos de vida poco saludables (dieta, inactividad física, abuso de alcohol y tabaco, trastornos del sueño), asociados a las enfermedades psiquiátricas y a su necesidad de tratamiento farmacológico, que pueden conducir a una evolución más rápida de la enfermedad.
Además, el análisis pone de relieve que el aumento de la mortalidad, acompañado de la reducción de las tasas de hospitalización en cuidados intensivos, puede reflejar también una menor tasa de acceso a los cuidados necesarios.
Cambio de perspectiva
"Estos resultados demuestran la necesidad de enfoques específicos para el manejo y la prevención de COVID-19 en pacientes con trastornos mentales", explica el profesor Benedetti.
Junto con el Dr. Vai, el profesor Benedetti participó en un estudio firmado por las principales organizaciones europeas de salud mental, en el que se pedía una acción coordinada para garantizar la prioridad de la vacunación en los pacientes psiquiátricos. El estudio se publicó también en las páginas de The Lancet Psychiatry.
"Hoy en día es importante ocuparse de estos pacientes y evaluar sus necesidades de atención particular por parte de las autoridades locales para conseguir el acceso a la vacunación y al tratamiento hospitalario", concluye el Dr. Mazza.