Tumores pleurales malignos
¿Qué es?
Los tumores malignos de la pleura son un tipo de tumor que afecta a las valvas pleurales que recubren los pulmones y la superficie interna de la cavidad torácica. Son tumores bastante frecuentes que se pueden distinguir en:
- Tumores primarios (mesotelioma pleural maligno): aunque es raro, es el tumor primario de la pleura más frecuente; se asocia, en la mayoría de los casos, a la exposición profesional al amianto.
- Tumores secundarios: debido a la diseminación pleural por diversos tumores (principalmente metástasis de carcinoma de pulmón, mama, ovario, gastrointestinal, renal, etc.).
¿Cuáles son los síntomas?
Los síntomas suelen ser insidiosos e inespecíficos.
En el 90% de los casos se produce un derrame pleural recurrente, que conlleva una dificultad respiratoria con "hambre de aire", uno de los signos que más afecta a la calidad de vida del paciente. Además, puede aparecer astenia (falta de fuerza), pérdida de peso importante (adelgazamiento), dolor torácico sordo (toracodinia) acompañado de una "sensación de peso" en el pecho.
Con menor frecuencia, puede aparecer una tos sibilante, hemofilia, disfagia, distonía y fiebre.
¿Cómo se diagnostica?
Cuando se presenten estos síntomas, es conveniente someterse a un examen médico:
- radiografía de tórax: puede confirmar o no la presencia de un derrame y/o el engrosamiento de la pleura;
- toracocentesis (a realizar en caso de derrame pleural): colocación de un pequeño drenaje pleural para aspirar todo el líquido pleural con el doble objetivo de resolver la disnea del paciente y recoger parte del líquido que se analizará al microscopio;
- análisis citológico: análisis microscópico del líquido pleural que puede permitir un diagnóstico, aunque no es frecuente;
- TAC de tórax: puede poner de manifiesto, con mayor precisión, engrosamientos/lesiones pleurales sólidas y demostrar la presencia o ausencia de lesiones pulmonares asociadas;
- videotoracoscopia: procedimiento diagnóstico y a menudo también terapéutico que permite un diagnóstico seguro en casi todos los casos; permite definir el grado de extensión intratorácica de la enfermedad; a criterio del médico, puede realizarse con anestesia local o general.
Exámenes sugeridos
¿Cómo se trata?
El tratamiento de los tumores pleurales incluye diversas combinaciones de cirugía, quimioterapia y radioterapia. El enfoque es siempre multidisciplinar, con la participación simultánea de un cirujano, un oncólogo y un radioterapeuta. El tratamiento quirúrgico implica diferentes tipos de intervención, en función de la extensión de la enfermedad y del estado general del paciente, que debe ser evaluado caso por caso junto con los colegas oncólogos y radioterapeutas. Entre ellos se encuentran:
- videotoracoscopia y talking de la cavidad pleural;
- pleurectomía por toracotomía;
- pleuropneumonectomía.
Procedimientos sugeridos
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